LA PIÑA



  La piña tropical o americana, pertenece a la familia de las bromeliáceas, familia ésta que cuenta con más de 1.400 especies distintas, todas ellas en la América tropical, y que debe su nombre a una enzima proteolítica llamada bromelina que se caracteriza por facilitar el proceso de digestión de las proteínas. Es originaria de Brasil, donde fue descubierta por los colonizadores españoles y portugueses, e introducida posteriormente en Europa.

  La piña es el fruto de la planta conocida como Ananás (ananás comosus), que en el idioma nativo significa “fruta excelente”, y denominada piña en España por el parecido de su piel con la forma de la piña del pino, sin embargo, en Portugal por ejemplo la siguen conociendo como Ananás, o en otras zonas es conocida como piña tropical, para distinguirla de la piña del pino, o de las piñas o mazorcas de maíz.

  La temporada de esta fruta es el verano en su lugar de procedencia, que se corresponde con el invierno en el continente Europeo, si bien se puede disponer de ella en los supermercados en cualquier época del año. No obstante, si es importante saber que la piña sólo madura convenientemente en la planta y cuando con fines comerciales se recolecta antes de estar en su punto de maduración, tiene mayor acidez y muchos menos nutrientes. La piña está en su punto de maduración cuando el aroma es intenso, las puntas de las hojas son fáciles de arrancar y adquieren un color anaranjado, y cuando al presionarla notamos que su pulpa cede.


VALOR NUTRICIONAL:

  Es una fruta jugosa, grande, que suele pesar unos 2 kilogramos. Es además muy digestiva y rica en nutrientes, por lo que se ha convertido en un elemento importante en las dietas, no sólo por su digestibilidad, sino por sus cualidades hidratantes y su bajo valor calórico (por su alto porcentaje de agua en su composición). Cuando su punto de maduración es alto, entre el 10 y el 15% se corresponde con azucares, del tipo hidratos de carbono simples o de rápida absorción. La vitamina C es la más abundante en su composición (gracias a la presencia de los ácidos cítrico y málico), seguida de la Vitamina B1 (Tiamina) y la Vitamina B6 (Piridoxina). En lo que a minerales se refiere destaca por el Calcio, el Magnesio y el Potasio. Hay añadir a todas estas cualidades dietéticas su alto contenido en fibra.

  Por el contenido elevado de la enzima bromelina, que como decíamos al principio, da nombre a la familia botánica, facilita la digestión. Esta enzima es capaz de destruir las moléculas de las proteínas, dejando libres los aminoácidos que las forman.
  
  Por cada 100 gramos de pulpa de fruta, dependiendo de su cultivo, clima, peso y madurez, su composición aproximada es la siguiente:

VALOR ENERGÉTICO: 49 Kcal.

AGUA: 87 ml.

PROTEINAS: 0,40 gramos.

GRASAS: 0,40 gramos.
De las cuales:
SATURADAS: 0,03 gramos.
MONOINSATURADAS: 0,04 gramos.
POLIINSATURADAS: 0,08 gramos.

HIDRATOS DE CARBONO: 12,40 gramos
De los cuales AZÚCARES: 9,8 gramos

FIBRA: 1,40 gramos.


MINERALES:
Calcio: 20 mg.
Cobre: 0,110 mg.
Hierro: 0,29mg
Fósforo: 8 mg.
Magnesio: 14 mg.
Manganeso: 0,927 mg.
Selenio: 0,0001 mg.
Sodio: 1 mg.
Zinc: 0,12mg.

VITAMINAS:
Vitamina A: 58 UI.
Vitamina C: 20 mg.
Vitamina B1: 0.079 mg.
Vitamina B2: 0.032 mg.
Vitamina B3: 0.500 mg.
Vitamina B5: 0.213 mg.
Vitamina B6: 0.112 mg.
Vitamina B9: 14 mg.
Vitamina E: 0.02 mg.
Vitamina K: 0.7 mg.


¿COMO SE TOMA?

  Es muy común encontrar esta fruta en conserva, pero si bien de esta forma sigue manteniendo su fibra, vitaminas y minerales, pierde casi totalmente la bromelina, por lo que no mantiene su calidad digestiva y aumenta su carga calórica por los azúcares del almíbar que la acompaña. Puedes encontrarla envasada en su jugo, pero igualmente sufre esta pérdida de bromelina, aunque la carga calórica no es tanta, especialmente si escurrimos el jugo completamente antes de consumirla.


  Lo mejor es ingerir la fruta natural, recien cortada, o si la preparamos en zumo, bebida inmediatamente. Es perfecta como postre, o como preventivo digestivo, tomada como aperitivo, que además tendrá un efecto previo saciante que evitará comidas excesivas. Forma parte de todo tipo de recetas, como compañera de otros alimentos dulces, o salados, siendo habitual en las recetas encontrarla acompañando desde un helado hasta una pizza, pasando por todo tipo de ensaladas y salsas. Pocas frutas dan tanto juego en la cocina como la piña tropical.

SUS CUALIDADES TERAPEUTICAS:

  Ya sabemos que actúa como pre-digestivo y como saciante. Es también ligeramente diurético, ayudando en combinación con otros productos a liberarnos de la retención indeseada de líquidos. Si a esto le añadimos la fibra que contiene se convierte en un elemento importante como complemento en dietas de adelgazamiento, retención de orina, estreñimiento y digestiones lentas. Sin embargo, no es recomendable en enfermos de úlcera gastroduodenal, pues aumenta la producción de jugos gástricos y sería perjudicial para estas personas.

  El uso terapéutico más conocido de la piña es su acción anticelulítica, por eso son muchos los laboratorios que comercializan piña en forma de cápsulas, orientados a tratamientos anti-celulíticos, ya que de esta forma se puede aislar la bromelina del tallo, donde es más abundante que en el fruto. En la celulitis, la hipertrofia de las células adiposas, donde se acumulan líquidos, grasas y toxinas, producen hinchazón que oprimen los tejidos que les rodean y crean problemas circulatorios y linfáticos. La bromelina tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que se usa como complemento a tratamientos anticelulíticos.